La hipertensión es una de las enfermedades que más afecta a millones de personas, sin que un gran porcentaje de ellas lo sepan. Por lo general, esta se controla con medicamento, pero un equipo de investigadores ha descubierto cómo controlarla sin necesidad de este.
La hipertensión es la elevación de la presión arterial de forma continuada o sostenida. Es decir, es cuando el corazón presiona las arterias para que estas lleven sangre hacia los diferentes órganos del cuerpo. Lo cual supone una mayor resistencia para el corazón. Este responde aumentando su masa muscular para poder afrontar ese esfuerzo extra, aunque termina siendo perjudicial para este órgano.
Ya que el aumento en la masa muscular no se acompaña de un aumento equivalente en el flujo sanguíneo. De acuerdo con lo que informa la Fundación Española del Corazón.
Esta enfermedad es más frecuente a partir de los 40 años, aunque puede presentarse a cualquier edad. Aunque existen medicamentos eficaces para controlarla, cada vez es menos aceptada la idea de que controle por medio de métodos alternativos.
Las técnicas de relajación son buenas para controlar la hipertensión, pues los altos niveles de estrés son uno de los principales motivos de riesgo. No solo para la hipertensión, sino para muchas enfermedades. Estas han sido confirmadas en una revista científica.
Las técnicas de relajación pueden ayudar a reducir la presión arterial alta
De acuerdo con el metaanálisis de estudios previos publicados en la revista científica BJM Medicine, las técnicas de relajación pueden ayudar a controlar la hipertensión. Desde el control de la respiración y la meditación, hasta el tai-chi o la biorretroalimentación podrían ser efectivos para el control de la hipertensión.
Para consolidar la evidencia, se revisaron investigaciones publicadas hasta febrero de 2024 que examinaron el efecto que tenían estas técnicas sobre la presión arterial elevada. (Igual o superior a 120/80 mm Hg) y la hipertensión (igual o superior a 140/90 mm Hg).
Se analizaron 182 estudios, de los cuales 166 se centraron en pacientes hipertensos y 16 en personas con presión arterial elevada, pero que no tenían diagnóstico de hipertensión. También se aplicó un metaanálisis de red para comparar diversos tratamientos al mismo tiempo.
¿Qué métodos alternativos son mejores para tratar esta condición?
Los resultados combinados de 54 estudios revelaron que varias técnicas de relajación fueron capaces de reducir la presión arterial, tanto sistólica como diastólica. Esto en pacientes hipertensos que llevaron a cabo las técnicas y durante los primeros tres meses.
Entre las técnicas que más se utilizaron, se encuentran el control de la respiración (13 estudios), el yoga y el tai chi (11 estudios), la biorretroalimentación (8), la relajación muscular progresiva (7) y la música (7).
Controlar la respiración se asoció con una reducción media de 6,65 mm Hg en la presión sistólica. La meditación logró una disminución de 7,71 mm Hg, las prácticas meditativas en movimiento como el tai chi redujeron en 9,58 mm Hg y la atención plena, en 9,90 mm Hg.
Mientras que la música se vinculó a una reducción de 6,61 mm Hg; la relajación muscular progresiva, a 7,46 mm Hg; la psicoterapia, a 9,83 mm Hg; y las técnicas combinadas, a 6,78 mm Hg.
Resultados finales
Sin embargo, los beneficios no se observaron claramente después de los tres meses. Ya que, el lapso entre los 3 y los 12 meses no mantuvieron la misma efectividad observada al principio. Por lo que las técnicas que más se evaluaron en este periodo fueron la biorretroalimentación (7 estudios), el yoga/tai chi (4) y la relajación muscular progresiva (4).
Cabe recalcar que la hipertensión es una enfermedad crónica, por lo que es muy probable que en algún momento se requiera medicación específica. A causa de ello, lo mejor es que te acerques con tu especialista para que te brinde el tratamiento correcto en caso de que padezcas hipertensión.