Un equipo de científicos alemanes ha llevado a cabo una investigación en la que se descubrió que los rayos de plasma frío son capaces de destruir células tumorales, aunque estas se encuentren en capas del tejido profundo. Lo cual podría cambiar la forma en la que se trata esta enfermedad.
Créditos de imagen: iStockUn equipo de científicos del Instituto Leibniz de Ciencia y Tecnología del Plasma, el Hospital Universitario de Greifswald y el Centro Médico Universitario de Rostock realizaron una investigación sorprendente relacionada con la forma en la que se podría tratar el cáncer.
Los avances que se han logrado para erradicar el cáncer cada vez son más grandes y esperanzadores. Desde nuevos fármacos, terapias y vacunas, hasta un reciente descubrimiento llevado a cabo por científicos alemanes: el uso de rayos de plasma frío.
El grupo de investigadores demostró que los rayos de plasma frío son capaces de penetrar en las capas más profundas de los tumores y atacar las células cancerosas. La clave de la eficiencia de este método se debe a las moléculas de vida corta en el plasma.
Esto contradice las suposiciones que se han mantenido con respecto al papel del peróxido de hidrógeno. Y abre una nueva puerta hacia nuevos y mejores tratamientos contra el cáncer.
Plasma frío: la nueva apuesta contra el cáncer
Los investigadores desarrollaron nuevos modelos de tejido que por primera vez permitieron un seguimiento detallado de cómo los componentes específicos del plasma afectan a las células cancerosas.
El plasma es un gas ionizado que produce grandes cantidades de moléculas químicamente activas. A las cuales se les conoce como especies reactivas de oxígeno y nitrógeno. Estas moléculas de vida corta son capaces de ejercer efectos de importancia en los procesos biológicos.
Entre estos procesos, se encuentra que pueden influir y determinar la supervivencia o la muerte de las células tumorales.
“Los efectos del plasma en el tejido son complejos y poco conocidos”. Expresa Lea Miebach, autora principal. “Por ello, desarrollamos un modelo de hidrogel 3D que imita el tejido tumoral real. En este modelo, pudimos observar con exactitud la profundidad de penetración de las moléculas de plasma y qué moléculas son importantes para sus efectos en las células tumorales”.
Créditos de imagen: iStockResultados del estudio
Los resultados demostraron que moléculas de vida corta, como el peroxinitrito, pueden penetrar varios milímetros en el tejido. Anteriormente, se consideraba al peróxido de hidrógeno como el ingrediente principal activo en estudios de laboratorio, pero mostró eficacia limitada. Pues, cuando se eliminaba deliberadamente, el plasma se mantuvo con alta potencia.
También probaron un modelo que simulaba la terapia adyuvante posquirúrgica. Las células tumorales residuales en los bordes de una incisión artificial se trataron con plasma. Los resultados mostraron un efecto destructor. Sobre todo, en las células que habían invadido el tejido que lo rodea.
Esto también sugiere que hay una posibilidad de reducir el riesgo de recurrencia después de que se realice la cirugía.
“Nuestros resultados podrían mejorar significativamente el uso del plasma en medicina”. Revela el profesor Sander Bekeschus, PhD, director del Programa de Investigación en Medicina del Plasma del INP. “Cuanto mejor comprendamos qué moléculas están activas en los tejidos, con mayor precisión podremos utilizar los dispositivos de plasma para cada tipo de cáncer”.
En este estudio, los investigadores usaron un dispositivo de plasma aprobado médicamente llamado “kINPen”. En un futuro, se podría recurrir a este método para que los tratamientos contra el cáncer sean más efectivos y menos agresivos que los convencionales.
