
SANTA CRUZ.- Desde que se determinara que el estadio Gilberto Parada de Montero sea el escenario deportivo «oficial» para los partidos que equipos profesionales cruceños tengan que oficiar de locales, debido a las obras en estadio Ramón Tahuichi Aguilera se llevan a cabo; las calles de la localidad montereña se tornan en campos de batalla, después de los partidos.
La última experiencia deplorable se registró el pasado miércoles, luego de la victoria de Oriente Petrolero (2-1) frente a Guabirá por la Copa Bolivia. Un grupo de fanáticos del equipo azucarero se enfrentó a la Policía, que hizo el trabajo de contención una vez finalizado el encuentro. La gresca se inició luego de que un hincha de Oriente cruzara por la vía con la camiseta del equipo Albiverde. En el lugar estaban los enfurecidos hinchas del Rojo, que tomaron la presencia del ciudadano como provocadora.
Ante esa situación se generó un enfrentamiento entre los seguidores de Guabirá y oficiales de la Policía, que dejó como saldo una persona herida.
(AGENCIAS)
La entrada Violencia recurrente se publicó primero en Deportes.