Los árboles también tienen comunicación entre sí, de acuerdo con un nuevo estudio. Antes de que se presenten los eclipses, una especie de árbol es capaz de “comunicarlo” con los otros árboles que se encuentren cerca. Y así es como lo han descubierto los científicos.
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Créditos de imagen: Getty Tim82 | Getty ImagesAntes de que suceda un eclipse, es probable que lo sepamos gracias a la predicción astronómica. Estos eventos se pueden anticiparse con exactitud, y podemos informarnos por medio de noticias o sitios web astronómicos. Sin embargo, no somos los únicos que podemos enterarnos.
Los eclipses solares no solo ejercen influencia en los humanos, sino también en las plantas. Y en especial, en los árboles, concretamente, los que se encuentran en los Dolomitas. Eso es lo que ha demostrado un grupo internacional de científicos, dirigido por el Instituto Italiano de Tecnología de Génova.
El cual ha descubierto que los árboles de esta región responden activamente al eclipse solar, comunicándose entre sí y sincronizando sus señales bioeléctricas mucho tiempo antes de que empiece a suceder el eclipse. El estudio se publicó en la revista Royal Society Open Science.
Los árboles pueden comunicarse entre sí, según estudios
El comportamiento de las plantas también se ven afectadas por los eclipses. Para comprobarlo, los investigadores monitorearon la actividad bioeléctrica de los árboles de los Dolomitas, y específicamente, de los abetos del Parque de Paveneggio.
Esto durante el eclipse solar parcial que ocurrió en octubre de 2022, por medio de sensores y electrodos hechos a medida que se fijaron en tres árboles. Dos de los árboles monitoreados tenían 70 años y el otro, solo 20 años.
Mientras se llevó a cabo el estudio, descubrieron que la actividad eléctrica de los tres árboles se acentúo de forma importante. Tanto antes como durante el evento astronómico. Otro detalle impresionante es que los árboles de mayor edad respondieron al eclipse antes que el más joven.
Lo anterior podría sugerir que los árboles de 70 años, al ser mayores y ya haber atravesado un eclipse solar, desarrollaron una especie de memoria. Además de mecanismos para anticiparse y responder al evento, así como transmitir la información a los ejemplares más jóvenes.
Mediante modelos informáticos y métodos analíticos avanzados, pudieron confirmar que el eclipse no solo influye en las respuestas bioeléctricas de los árboles individuales. Sino que su actividad estaba conectada y sincronizada en un sistema colectivo y coordinado.
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Créditos de imagen: FreepikLa funcionalidad de la comunicación entre los abetos durante un evento astronómico
Lo que demuestra este estudio es que la reacción de los árboles funciona como si se tratara de un solo organismo. Hace pensar que esto influye en los comportamientos vegetales, así como en la forma de adaptación que tiene la biodiversidad y funcionalidad del bosque. Mismo que ayuda a enfrentar los cambios repentinos y que no se pueden predecir.
Aunque es importante mencionar que algunos científicos creen que hay que tomar este estudio con cuidado, pues no cuenta con lo que se llamarían normas básicas necesarias para la ciencia. Pues el número de pruebas (3 árboles), es muy pequeño y hay un gran número de variables que podrían existir.
Por lo que es un detalle interesante a tomar en cuenta, pero que, al igual que cualquier otro estudio incipiente, es necesario obtener más pruebas e investigar más antes de afirmar por completo lo que se describe en ellos.