
En la actualidad, ver a una persona tatuada es algo normal. Sin embargo, esto no era así antes del siglo XXI, pues el que un individuo portara tatuajes se consideraba marginal o la pertenencia a un grupo en concreto, como marineros o prisioneros.
Pero, con el paso del tiempo, dejaron de ser vistos como un estigma y han pasado a ser un adorno del cuerpo bastante normalizado. No obstante, a pesar de que ya no es mal visto, sigue latente la duda de si los tatuajes son un factor de riesgo para desarrollar cáncer o se trata solamente de un mito.
Debido a que es muy raro encontrar a una persona menor de 40 años que no tenga un tatuaje, y a la vez, que este grupo de edad esté en mayor riesgo de desarrollar complicaciones de salud. Es que se ha empezado a relacionar los tatuajes con un mayor riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer.
Entre ellos, se consideran los melanomas. Y, a causa de la creciente preocupación por los problemas de salud que los tatuajes puedan ocasionar en la piel. Por ello es que se ha iniciado una investigación dermatológica, además de que se han encendido las alertas entre autoridades de salud y personas tatuadas.
¿De verdad los tatuajes incrementan el riesgo de padecer cáncer de piel?
De acuerdo con investigaciones recientes publicadas en BMC Public Health, se sugiere una posible relación entre los tatuajes y un mayor riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer. Mientras que un estudio de la Universidad de Dinamarca del Sur analizó datos de más de 5,900 gemelos.
Después de compararlos, se descubrió que aquellos que tenían tatuajes aumentaban el riesgo de padecer cáncer de piel en un 62%. En comparación con aquellos que no estaban tatuados.
Los investigadores ponen sobre la mesa que las partículas de tinta pueden migrar desde la piel hasta los ganglios linfáticos. Lo que puede desencadenar inflamación crónica y crecimiento celular anormal. Sin embargo, todavía no se comprende al cien por ciento cómo es el impacto de esta acumulación de tinta en el sistema inmunológico.
A pesar de que los resultados de estas investigaciones encienden las alertas entre la población y las autoridades de salud. La realidad es que aún no está bien establecida cuál es la causa directa por la que hay relación entre los tatuajes y el cáncer de piel.
Otros factores que aumentan el riesgo de padecer esta enfermedad
Incluso, algunos expertos afirman que, aunque sí se ha registrado un aumento en los casos de melanoma diagnosticado en zonas tatuadas. La asociación podría ser coincidente y no necesariamente una relación directa por tener un tatuaje en dicha zona.
Un factor más a considerar es que la composición de las tintas varía y no siempre está regulada. Si se toma en cuenta, esto también podría ser un riesgo más a tomar en cuenta al momento de desarrollar cáncer de piel.
Por otro lado, los dermatólogos mencionan que los tatuajes pueden influir en el diagnóstico del cáncer. Ya que la tinta puede ocultar cambios en la piel, lo que no permite detectar lesiones sospechosas a tiempo.
Sin embargo, todavía hay mucho por investigar, por lo que todavía es muy pronto para afirmar que los tatuajes son causantes de cáncer de piel. Si bien una investigación mostró una posible relación, falta mucho por investigar para llegar a una conclusión convincente.
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