Publicado:
11 feb 2024 10:58 GMT
Mike Lee sostiene que la intencin de la Casa Blanca de ayudar a Kiev «tanto tiempo como sea necesario» no es una estrategia, sino un «plan para otra guerra eterna».
En una sesión del Senado de EE.UU. celebrada este sábado, el republicano Mike Lee habló durante casi cuatro horas sin interrupción para protestar contra un proyecto de ley de ayuda a Ucrania que no incluye medidas de control fronterizo e instó a sus colegas a votar en contra.De acuerdo con el senador, uno de los problemas más importantes de este proyecto es que se trata de un «gasto sangriento y de un despilfarro imprudente para el contribuyente estadounidense con el fin de financiar una guerra ‘proxy’ en el otro lado del mundo». «¿Puede alguien decirme cuándo se admitió a Ucrania como el 51.º estado? Debe ser que me perdí ese día», señaló.
Subrayó que la postura de la Administración del presidente Joe Biden, la de que Washington debe ayudar al régimen de Kiev «tanto tiempo como sea necesario y tanto como sea necesario», no es una estrategia real. «No es una estrategia en absoluto. De hecho, es un plan para otra guerra eterna», declaró.»Están jugando con fuego»Según sus palabras, los políticos que actualmente dirigen EE.UU. «creen que están jugando un gran juego de ajedrez geopolítico», pero, «como millones de estadounidenses han visto, solo están jugando con fuego». «No podemos destinar más dinero de EE.UU. a estos conflictos sangrientos en todo el mundo sin mantener la transparencia en el acceso y el control. No podemos hacer eso y pretender que no estamos perjudicando a familias trabajadoras [estadounidenses] que tienen dificultades para poner comida en la mesa y tener un techo sobre sus cabezas debido a gastos imprudentes como este», manifestó.Lee agregó que no se puede enviar miles de millones de dólares a Ucrania, mientras las propias fronteras de EE.UU. «están sangrando», y calificó este comportamiento de las autoridades de «traición» a sus ciudadanos. «El pueblo estadounidense no debería tener que vigilarnos cada hora de cada día para que su propio Gobierno no les apuñale por la espalda», afirmó, señalando que el país está ahora dominado por una «unión malsana entre empresas y los políticos de Washington» destinada a «hacer un negocio de derramamiento de sangre».
El senador también advirtió de la amenaza de verse arrastrados a un conflicto directo con una potencia nuclear. «Creo que es seguro decir que lo que estamos haciendo es una locura. […] Pero no te preocupes, EE.UU. Estoy seguro de que no ocurrirá nada malo. No preste atención al hecho de que estamos implicados indirectamente en una guerra ‘proxy’ con un país que tiene armas nucleares suficientes para matarnos muchas veces», dijo sarcásticamente.El paquete de ayuda que los congresistas debaten incluye 95.000 millones de dólares en gastos de emergencia, incluidos 60.000 millones para Ucrania, 14.000 millones en asistencia de seguridad para Israel y casi 5.000 millones para ayudar a disuadir la supuesta «agresión» china contra Taiwán. Si se aprueba en el Senado, requerirá la aprobación de la Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, antes de pasar al presidente para su aprobación final.